En nuestra efeméride de la semana destacamos el Día de la Antártica Chilena, fecha que recuerda que en 1940 el entonces presidente de la República, Pedro Aguirre Cerda, firmó el tratado que establecía los límites del Territorio Chileno Antártico.
Las bajas temperaturas del continente blanco no son impedimento para el desarrollo de la variada fauna que lo habita. Cetáceos como la ballena fin, la azul, la jorobada, la minke, la franca, el cachalote y distintos tipos de delfines, nadan por estos mares como parte de su proceso migratorio. A ellos se suman los pinnípedios, grupo dentro del cual se encuentran las focas y los lobos y leones marinos. De acuerdo con datos entregados por el Instituto Chileno Antártico, las aguas de la región también albergan al krill, cangrejos, camarones, calamares, pulpos, jibias, caracoles, lapas y varias clases de bivalvos. Y cómo no mencionar al personaje más típico de la zona: los pingüinos. Entre ellos destaca el pingüino rey, el macaroni, el emperador y el de penacho amarillo quienes, gracias a su plumaje y características de su piel, son capaces de soportar las bajísimas temperaturas.
¿Cómo sabemos todo esto? Gracias a que la Antártica alberga bases científicas internacionales lideradas por expertos que permanentemente están recogiendo información del entorno de este gélido rincón del mundo.
